cultura de otra especie
Imagen
Joel Peter Witkin
BELLEZA AMERICANA
Su arte fotográfico es de otro tipo. No le interesa capturar el instante decisivo de la vida en movimiento ni tampoco técnicas como el collage. En cambio, utiliza algunos procedimientos que le permiten modificar la toma en el momento de la exposición de la imagen sobre el papel, o en el revelado mismo.
Los temas elegidos, al igual que los modos de composición, logran la conmoción del que mira y quieren ser testimonio artístico de una época.
"Busco -dice Witkin- llegar a una zona emocional profunda dentro del espectador. Y habiendo tocado ese lugar, mi esperanza no sólo es mostrar la locura de nuestras vidas, sino también que históricamente, mis obras reflejen esta época diversa y desesperada."
HUMANIDAD FREAK
Nunca tanto como en la fotografía de Joel Peter Witkin, la forma y el contenido alcanzan a dar un giro sobre sí mismos como si fueran dos caras de una misma moneda. La atrocidad de lo retratado se desborda y gotea por la truculencia de una estética recia y oscura.
Como en un circo de personajes extravagantes, sus fotografías muestran la cara oculta, lo discriminado, aquello que la especie humana mantiene a kilómetros mentales de distancia: hombres mancos, jorobados, mujeres barbadas, transexuales, cadáveres, gente con deformaciones genéticas o víctimas de accidentes.
Una lectura apresurada podría entonces, decir que Witkin es un sádico morboso que se vale del arte para sembrar su insanía o, que es un hábil mercader que ha conseguido convertir lo repulsivo en producto de venta. Y si todo eso puede ser cierto en parte, existe también la virtud de descubrir una veta inexplorada y la de hacer visible seres radicalmente diferentes en su contextura física a la noción aceptada de normalidad, o cuadros de situación que la sensibilidad media rechaza. O sea, lo que casi todos prefieren barrer debajo de la alfombra.
Muchas de sus obras sólo provocan el fuerte impacto de lo imposible de imaginar que exista, como la mujer con dos pezones en una de sus senos, o las hermanas gemelas unidas por la parte superior de sus cabezas. En otras, el impacto es absorbido por una potencialidad estética mayor como en “Le baisier” donde dos cabezas de viejos decrépitos se besan en un encuadre simétrico realmente sugestivo, o como en “Leda”, donde el surrealista prototipo humano posa con su terrible deformidad en medio de un paisaje más surrealista aún.
“Soy un retratista de las condiciones del ser" -explica y para conseguir sus modelos, acepta propuestas de quien crea tener su parte rara o repulsiva, pone avisos en internet solicitando tipos humanos determinados (como mujeres atractivas y sin brazos, gente con colas, cabezas de alfiler, brazos o piernas adicionales) o directamente va al encuentro de lo que necesita como cuando realizó el “Hombre de vidrio”.
En esa ocasión estaba buscando un muerto de esos que el personal de la morgue recoge todos los días de la calle y tenía que ser alguien especial, alguien que irradiara cierta fuerza desde su rostro. Para ello fue a la Ciudad de México y pidió colaboración a los recogedores de cadáveres para que lo ayudaran a hallar su modelo.
Ellos aceptaron no sólo avisarle telefónicamente cada vez que tuvieran los cuerpos sino que se comprometieron a acomodarlos con cuidado para que no se les rompieran las narices cuando los cargaban en sus camionetas, cosa que en el apilamiento sucedía con bastante normalidad.
La opción fue por un punk que Witkin intuyó como el modelo apropiado: su mirada tiene un dejo de bondad o una comprensión abarcadora como si fuese un Cristo o como si ya hubiese conocido la verdad más profunda y su cuerpo sentado en una silla, expone sobre su tórax las costuras que vuelven a unir la incisión provocada por la autopsia.
“Abundancia”, en cambio, muestra una modelo que ofreció posar. Se trata de una mujer a la que el fotógrafo norteamericano colocó sobre su cabeza flores, frutas y perlas. Ella no tiene brazos ni piernas y seguramente por esas carencias fue abandonada por su madre al momento de nacer.
FRICCION EN EL CUARTO OSCURO
Durante la segunda mitad del siglo XX, las diferentes manifestaciones artísticas experimentaron cambios drásticos en sus lenguajes. Los puntos de partida comenzaron a ser otros y todo el planteo resultante chocó con los tránsitos anteriores. La fotografía que no fue ajena a estos cambios, se otorgó a sí misma la libertad de jugar con nuevas posibilidades. El abanico se abrió y en un punto dado, mucho de lo descartado o lo nunca avizorado como posibilidad, comenzó a serlo.
La obra del fotógrafo norteamericano no sólo consiste en conseguir un modelo, ubicarlo en una pose determinada y agregarle elementos como flores, cisnes o antifaces sobre los ojos (que cumplen la función de dulcificar lo terrible de la imagen propuesta), sino que se extiende hasta el proceso de revelado.
Witkin rasca el negativo, lo corta, pone un tejido encima del papel que va a absorber la imagen y mientras la misma se va imprimiendo, rocía lloviznas de químicos y agua, consiguiendo así una fusión de tonos y espacios. Luego de la exposición del negativo, el papel se somete al procedimiento químico final para obtener la imagen y en esa instancia también, busca cambios marcando el papel o arañándolo. Finalmente cubre la fotografía con cera de abejas caliente y pule el papel. A veces amarillea la fotografía para que parezca vieja y como buen perfeccionista que es, ensaya una y otra vez sobre varios negativos de una misma toma hasta estar conforme con el resultado.
Quizá allí pueda encontrarse una explicación, para los notorios puntos de contacto que la fotografía de Joel P. Witkin tiene con la pintura: la manipulación. No se trata solamente de un ojo que ve tras la cámara, sino del mismo ojo mirando lo ya visto y permitiendo que su mano lo altere a gusto.
CAZADOR
Joel Peter Witkin nació en Nueva York en 1939. Hijo de padre descendiente de judíos rusos y de madre católica, la educación religiosa fue una de las especies con las que se condimentó su niñez. Relacionado con su vocación y con su interés por lo mórbido, hay tres hechos en su infancia que fueron casi señales en el camino.
El primero sucedió mientras salía del edificio donde vivía junto a su madre y su hermano. Al llegar a la calle oyó el sonido de un choque , vio a los tres automóviles allí con gente adentro llorando, gritando, pidiendo auxilio. En medio del gran alboroto, el pequeño Joel se soltó de la mano de su madre y llegó a presenciar entre los autos volcados, la cabeza de una niña que iba rodando.
El segundo hecho ocurrió en el ámbito laboral aprendiendo el oficio de su padre, y tiene como protagonista principal a un ojo que ve de tan cerca que puede sentir la agresión del objeto sobre sí mismo. "Mi primer trabajo consistió en romper vidrio (...) Naturalmente no teníamos protección. Durante las primeras dos o tres horas de estar rompiendo vidrios se me metió una astilla en el ojo. Mi padre la sacó. Tenía unas manos inmensas. Me dobló el párpado para atrás con el palito de un fósforo de madera -sus manos olían a masilla , puros y mugre- y retiró la astilla. Esa astilla se había incrustado en la parte blanca del ojo, y yo me estaba volviendo loco. Sin embargo, esa fue la comunicación más cercana que tuve con mi padre...”.
La última señal apareció en un sueño. “Unos ángeles radiantes –recuerda Witkin- veían como salían de un chorro de luz, las almas de los niños que cantaban alabanzas a dios. Cada niño llevaba impreso en una tablilla su futuro. Pero había un niño descontento, un bebé rebelde al que los ángeles advirtieron que iba a ser un ‘cazador de oscuridad’. El niño tenía en sus manos un objeto y ese objeto era una cámara fotográfica”.
Leonardo Scampini
Guido Sieber
CARICATURA DEL GROTESCO HUMANO
FLUJO DE TEXTO SUGERIDO EN LOS ROSTROS ACELERADOS. LA RETINA CRECIDA, ESTALLANTE. TRADUCIENDO, MEDIANDO ENTRE LA PERCEPCIÓN Y EL SENTIDO.
QUITAR EL RECUBRIMIENTO INSENSATO DE TODO. ABRIR LA VENTANA AL ROSTRO OCULTO. METER LA MANO EN ESE HOYO Y EXTRAER LA IMAGEN DOMINANTE. NO LA SUPERFICIE DEL CONTORNO HUMANO.
INMOVILIDAD HELADA. FRONTERA ENTRE EL RASGO Y LA INTERIORIDAD PSICOLÓGICA, ENTRE EL PATRÓN NORMALIZADO DE LA HUMANDAD Y LA ARBITRARIEDAD DEL PLAN.
GUIDO SIEBER NACIO EN 1963 Y VIVE EN BERLIN. TRAS SU PASO POR EL COMIC, SE DEDICA SOBRE TODO A LAS ILUSTRACIONES EN REVISTAS COMO ROLLING STONE, SZ MAGAZIN, SPIEGEL, STERN O FACTS.
noticias
-Folletín de diez manos. Cada uno de los autores que escriben la novela-folletín-blog (cabrera, cavallo, santullo, soriano, trujillo), escribe un capítulo de no más de 2000 palabras. Para eso tiene una semana de tiempo. Cuando termina, envía su capítulo al encargado de hacer el siguiente. Cuando se cumplen 5 vueltas y, por lo tanto, se llega al capítulo 25, la novela se termina. Cada capítulo está acompañado de la ilustración de algún artista. Interesante.
https://folletindediezmanos.
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-EE.UU y la música digital. En los pronósticos de la última edición de su reporte sobre la música grabada a nivel global, la firma Strategy Analytics anticipa un nuevo hito para los formatos digitales en el año que viene.La compañía estima que los consumidores estadounidenses gastarán $2.700 millones de dólares el año que viene en CDs, por debajo de $2.800 millones en música en línea. El reporte también contempla la situación en 2015, pronosticando que los ingresos de la música en línea estarán conformados en un 39% por descargas de sencillos, 32% por descargas de álbumes, 14% por suscripciones y 14% por publicidad.
-Cursos de música en internet. Artículos y videos para aprender a tocar o mejorar conocimientos sobre guitarra, piano y otros instrumentos. La página se llama Virtuosso (www.virtuosso.com)